Comentario:

En un periodo de 17 años, desde 1967 a 1983, se producen 283 películas fantaterroríficas en España, es decir, el 62 % de toda la producción cinematográfica de este género desde los comienzos de nuestro cine. Este periodo "fantástico", facilitado por la cierta apertura económica que supuso el Plan de Estabilización a finales de los 60, tendrá una primera etapa conocida como "La edad de oro del fantaterror español" hasta casi mediados de los años 70, coincidiendo con el fin de la dictadura franquista, con los Naschy, Ossorio, Klimovsky, Aured, Grau, un subversivo Franco (Jesús, no confundir con el otro), trabajando a destajo; otra, desde entonces hasta los primeros 80, el género se mantiene animado, especialmente con la apertura censorial, pero poco a poco vé mermado su apogeo por la rentabilidad de otros géneros como el erótico, es el auge de los films "S", con los que se mezcló en muchos casos ya en franca decadencia. La España socialista y, sobre todo la Ley Miró, subyugó el cultivo del género hasta la actualidad en que se atisba un leve resurgir, merced a la aparición de una nueva generación de jóvenes directores que de momento especializan su carrera dentro del fantástico: los Amenábar, Balagueró y Cía.